El sábado que viene se celebra Eurovisión, ese festival de la canción del que yo era fan. Y sí, digo era, pretérito imperfecto, porque este año me he enfadado con ellos. ¿El motivo? Decidió incluir la ikurriña en una lista negra de banderas prohibidas. Como os podéis imaginar, el revuelo que se formó fue importante y el Gobierno Vasco elevó una queja formal, con lo que en Eurovisión decidieron rectificar. Aunque la ikurriña se pueda lucir en el festival de la canción más friki de la historia, yo sigo ofendida. Por el gesto inicial y porque la bandera palestina sigue vetada.
Pero como una tiene sus contradicciones y le gusta la fiesta más que a un tonto un lápiz, he vuelto a quedar con mis amigos para ver Eurovisión. Eso sí, me rebelo y no pienso hacer cena temática del país organizador, como era mi costumbre; mis invitados tendrán que conformarse este año con unas palomitas y unas cervezas y refrescos para ver el sarao. Igual salen ganando, ojo, porque el plato más internacional que ha dado la cocina sueca son esas albóndigas que popularizó Ikea.
Crujientes y dulces, pero con un ligero toque salado. Así son las palomitas que vamos a hacer. Porque por muy enfadada que esté con los organizadores de Eurovisión no nos vamos a limitar a meter una bolsa al microondas y esperar tres minutos a que exploten los granos. Nosotros nos lo vamos a currar un poco más y vamos a hacer nuestras palomitas en una cazuela, como se hicieron siempre. También vamos a currarnos el caramelo con el que luego las cubriremos. Y además nos permitiremos meterlas en el horno, para que salgan aún más crujientes.
Sé que estaréis pensando (sí, porque yo también soy vaga) que podéis ahorraros unos minutos haciendo las palomitas en el microondas, mientras elaboráis el caramelo. Yo no os lo recomiendo; con una bolsita de esas el resultado final será demasiado salado y demasiado grasiento. El que avisa no es traidor, pero vosotros mismos. ¿Nos ponemos a ello?
Ingredientes:
- 115 g de granos de maíz
- Un chorrito de aceite
- 70 g de mantequilla
- 100 g de azúcar moreno
- 60 ml de miel
- 1/2 cucharada de sal
- 1/2 cucharada de bicarbonato
- 1/2 cucharada de extracto de vainilla
Elaboración:
- Para empezar ponemos un poco de aceite en una cazuela grande y, cuando este caliente, echamos los granos de maíz y tapamos la cazuela. Los granos de maíz empezarán a estallar y tendremos que remover de vez en cuando, hasta que el sonido de los estallidos comience a disminuir, que apagaremos el fuego.
- Ponemos las palomitas en un bol, intentando quitar los granos que no hayan explotado y reservamos.
- En un cazo pequeño, fundimos la mantequilla, el azúcar, la miel y la sal a fuego medio. Con una cuchara de madera mezclamos un poqui6to, sólo para que todo quede bien integrado.
- Al comenzar a hervir dejamos de remover y cocemos unos 5 minutos más, hasta que el caramelo espese y coja un tono dorado no demasiado intenso.
- Cuando tengamos nuestro caramelo listo lo retiramos del fuego y añadimos el bicarbonato (el caramelo burbujeará y se pondrá un poco más pálido, no os asustéis, que es lo que tiene que pasar) y la esencia de vainilla y lo mezclamos bien con una cuchara de madera.
- Llegó el momento de mezclar caramelo y palomitas. No lo hagáis de golpe, id echando el caramelo poco a poco, en tres o cuatro veces, removiendo bien las palomitas cada vez, para que el caramelo quede bien repartido.
- A continuación extendemos las palomitas sobre una bandeja de horno forrada de papel vegetal y las horneamos a 120°C, durante 1 hora más o meno. (Tened en cuenta que habrá que removerlas de vez en cuando, para que no se quemen).
- Sólo nos queda sacar las palomitas del horno y dejar que se enfríen antes de separarlas con las manos y comerlas.
- See more at:
http://restaurantefinmundo.blogspot.com.es/2014/09/palomitas-de-caramelo-casero-mi-nueva.html#sthash.zUKYWXHI.dpuf
0 comentarios:
Publicar un comentario