viernes, 24 de abril de 2020

Bizcocho coulant de chocolate y peras

Confinamiento, día 42. Ya queda menos para salir de esta, ya queda menos para salir de casa. Eso sí, hasta que no haya una vacuna para el Covid-19, o hasta que la gran mayoría de nosotros no haya pasado el coronavirus, dudo que volvamos a recuperar nuestra vida normal. Si es que alguna vez volvemos a lo que ahora entendemos por normalidad. Yo, que no soy muy de besar o abrazar, no haré un drama de que no nos podamos tocar tanto como antes. Jajajajaja. Aquí quien no se consuela es porque no quiere. 

Y si no encendeis el horno también es porque no queréis, porque aunque no vayáis al super todos los días seguro que tenéis en casa ingredientes para hacer un bizcocho. Yo he decidido aprovechar unas peras que tenía por casa para hacer uno de chocolate y peras. Seguro que lo habéis visto más de una vez por ahí, pero el mío tiene sorpresa. 

Sí, porque al final el resultado ha sido un poco diferente al esperado. ¿Por qué? Porque mis peras eran Conferencia, es decir, unas peras muy jugosas que sueltan mucho líquido durante la cocción. ¿El resultado? Que en vez de tener un bizcocho, bizcocho, me ha salido un bizcocho coulant. Un bizcocho perfecto en el exterior, pero con un corazón fluido en su interior. 

Al principio, al cortar el bizcocho, me llevé un disgustillo, pero cuando lo probé me pareció que estaba muy rico, y creo que si se toma tibio lo estará aún más. Eso sí, tendréis que desmoldarlo con un poco más de cuidado. Si vosotros queréis el bizcocho tradicional, el de toda la vida, sólo tenéis que aseguraros de usar peras menos jugosas, como la Ercolina o Bosc. Sea como sea, encendedor el horno y  aprovechad el #yomequedoencasa.

Ingredientes:
  • 40 g de cacao en polvo 
  • 210 g de leche entera
  • 3 huevos
  • 300 g de azúcar
  • 200 g de harina de repostería
  • 8 g de levadura química (tipo Royal) 
  • 100 g de aceite de girasol o de oliva virgen extra suave
  • Un par de cucharadas de yogur natural (Yo no tenía, así que he puesto dos cucharadas de mascarpone) 
  • 4 peras medianas

Elaboración:
  • Empezamos poniendo en un cuenco la leche y el cacao en polvo y removemos hasta disolverlo bien. 
  • En otro cuenco ponemos los huevos y el azúcar y los batimos bien hasta que estén blanquecinos y espumosos. 
  • Cuando los tengamos listos incorporamos las dos cucharadas de yogur (o de queso) y mezclamos bien. 
  • Añadimos el aceite y la mezcla del cacao y la leche y lo batimos todo bien. 
  • Echamos ahora la harina y la levadura y mezclamos con una espátula y sólo hasta conseguir que esté todo bien integrado. Reservamos.
  • Pelamos las peras dejándoles el rabito.
  • Ponenos la masa en un molde previamente engrasado y ligeramente enharinado, reoartimos las peras en el molde y lo cocemos en el horno previamente precalentado a 180ºC durante 35-40 minutos. 
  • Al sacar del horno lo dejamos entibiar para que no se nos rompa al desmoldar y ya lo tenemos listo para servir. (Como véis en las fotos a mí dos peras se me han ido a dónde han querido, pero no pasa nada. No quedará tan bonito, pero está igual de rico).

viernes, 17 de abril de 2020

Flan de limón

Confinamiento, día 35. Aquí seguimos, un mes ya de cuarenta para evitar la propagación del Covid-19. Yo sigo encerrada en casa, saliendo como mucho una vez a la semana, básicamente para hacer la compra para mí y para mi vecina, que la pobre ya tiene una edad y el marido no anda muy bien.

Y ella, como es muy agradecida, me dio el otro día dos kilos de limones, de los 200 que le trajo el hijo de la finca del pueblo, en una visita rápida que le hizo. Porque él sigue saliendo a trabajar todos los días y tiene miedo de contagiarles, aunque no tenga síntoma ninguno.

¿Y qué hacer con dos kilos de limones? Creo que voy a hacer algún bote de curd de limón para mi despensa, pero será la próxima vez que baje a la compra y me haga con un poco de mantequilla. Así que de momento, aprovechando que tengo azúcar, huevos, leche y un horno, me he decantado por un flan de limón. Una receta también válida para esos que se quejan de que no tienen ningún aparato que les haga la vida más fácil en la cocina: con un bol, unas varillas o un tenedor y la fuerza de vuestro brazo, sirve. ¿Encendemos ya el horno? Porque #yomequedoencasa. 

Ingredientes:

  • Azúcar y agua para hacer caramelo 
  • 4 huevos
  • 500 ml de leche
  • 100 g de azúcar
  • El zumo de 2 limones
  • Ralladura de limón

Elaboración:
  • Lo primero que tenemos que hacer es preparar un caramelo. No os puedo dar cantidades exactas, porque yo lo hago a ojo. Pero ya sabéis, azúcar, un poquito de agua y dejar que se haga un caramelo no muy oscuro. 
  • Cuando esté listo cubrimos el fondo y los lados de una flanera con el caramelo y reservamos.
  • A continuación ponemos los huevos en un bol y batimos bien, hasta lograr una textura espumosa. 
  • Añadimos luego la leche y continuamos batiendo. 
  • Incorporamos entonces el azúcar y volvemos a batir bien la mezcla.
  • Echamos el zumo y la ralladura de limón y volvemos a batir bien. 
  • Llenamos nuestra flanera con la mezcla, la colocamos dentro de una bandeja de bordes altos y la llenamos con agua, para que se cocine al baño maría. 
  • Metemos la bandeja con la flanera en el horno precalentado a 200ºC y lo cocemos durante 1 hora aproximadamente, o hasta que quede bien cuajado. 
  • Una vez listo lo dejamos enfriar unos minutos a temperatura ambiente y lo metemos en la nevera durante al menos 4 horas. 
  • Pasado ese tiempo ya lo tenemos listo para servir y disfrutar.

viernes, 10 de abril de 2020

Nubes de chocolate

Confinamiento, día 28. Sí, cuatro semanas ya en casa para acabar con la pandemia del coronavirus. Y estos días, además, coinciden con Semana Santa, por lo que a más de uno se le está haciendo todavía más cuesta arriba que antes. Unos esperaban las procesiones, otros el viaje a la playa o la escapada a una ciudad europea, y lo más lejos que vamos a ir es al trastero. 

Pero hay que hacerlo, porque nunca fue tan fácil salvar el mundo; sólo hay que quedarse en casa. Después de cuatro semanas encerrados, sin ir a trabajar, al gimnasio, de cañas, pero, sobre todo, sin poder ver, tocar, abrazar y besar a nuestros seres queridos, sería un error que nos relajásemos ahora, que saliéramos a la calle prematurame, que aumentará el número de contagios y, por consiguiente, el tiempo que nos tendremos que quedar en casa de nuevo. Así que un poquito de cabeza, por favor. 

¿Y cómo alegramos este tiempo de cuarentena? Pues con un dulce, por supuesto. Y además con ingredientes que todos tenemos en casa. Huevos, azúcar, chocolate y gelatina. Porque sí, seguro que tenéis gelatina. Seguro que la comprasteis para hacer una tarta de queso sin horno, o una de tres chocolates y aún la tenéis en la despensa. ¿Y qué vamos a hacer con esos ingredientes? Unas deliciosas nubes de chocolate. Esa golosina que nos volvía locos en nuestra infancia, y a la que ahora vamos a dar un toque de sofisticación. Para picar mientras vemos la tele, para acompañar un café o un té o para regalar a alguien al que de verdad queremos cuando todo esto acabe. Cuando todo esto acabe, porque de momento, #yomequedoencasa. 

Ingredientes:

  • 280 g de azúcar
  • 3 claras de huevo
  • 6 hojas de gelatina (12g)
  • 80 g de chocolate negro 70% 
  • 90 ml de agua
  • Una cucharada sopera de zumo de limón
  • 40 g de Maizena 
  • 40 g de azúcar glas
  • 40 g de cacao puro en polvo para rebozar las nubes 

Elaboración:

  • Para empezar ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría. 
  • A continuación mezclamos el azúcar glas con la maizena y reservamos.
  • Ponemos las claras de huevo en un bol con la cucharada de zumo de limón y batimos hasta tenerlas a punto de nieve.
  • En un cazo ponemos el azúcar y el agua y calentamos a fuego medio, sin dejar de remover, para que se disuelva bien el azúcar. 
  • Cuando el almíbar haya llegado a los 130ºC (o haya hervido y espesado un poco) añadimos la gelatina bien escurrida y ponemos a calentar lo justo para integrar bien la gelatina.
  • Incorporamos entonces el almíbar a la clara montada, poco a poco y sin dejar de batir a velocidad baja.
  • Añadimos el chocolate derretido, subimos un poco la velocidad (un poco, ya que si batimos a velocidad muy alta las nubes quedarán duras) y seguimos batiendo hasta que la mezcla llegue a temperatura ambiente.
  • Echamos entonces nuestra mezcla en un molde previamente engrasado y espolvoreado con la mezcla de azúcar glas y maizena, espolvoreamos también por encima con esta mezcla y dejamos enfriar en la nevera al menos 2 o 3 horas. 
  • Pasado ese tiempo desmoldamos, cortamos en cuadrados y rebozamos nuestras nubes en cacao en polvo. 
  • Sólo nos queda dejarlas reposar un par de horas para que pierdan humedad y disfrutar como niños con esta golosina.