sábado, 25 de febrero de 2017

Guacamole y salsa de queso para mojar totopos en la noche de los Óscar

Esta noche, a partir de la 1:30h de la madrugada en España, llega la 89 edición de los premios Óscar desde el Dolby Theatre de Los Ángeles. Mi gran apuesta sería Comanchería (¡¿ a quién se le ocurrió traducir Hell or High Water como Comanchería?!), un western moderno con banda sonora de Nick Cave y dirigido por un escocés, aunque soy consciente de que no se va a comer nada de nada. Bueno, espero que Jeff_Bridges sí se lleve el premio a mejor actor secundario. Un actor secundario muy presente a lo largo de toda la película, y con una presencia brutal. Pero quitando este premio (por favor, por favor, por favor) todo indica que la gran triunfadora de la noche será La La Land, la película, con multitud de referencias a los clásicos, que amenaza con poner otra vez de moda los musicales. La película, está muy bien, no lo voy a negar, per yo soy de ese pequeño porcentaje de españoles que se esperaba más.

Pero además, después de que la edición del año pasado estuviera dominada por el hombre blanco, se espera que esta edición sea una de las más reivindicativas con los derechos del hombre negro (habrá que decir del hombre y la mujer afroamericanos para ser políticamente correctos?) con películas como Figuras Ocultas, Moonlight o Fences y candidaturas como las de Denzel Washington, Viola Davis o Taraji P. Henson. Pero yo, además, espero que tras la llegada de Trump a la presidencia del país más poderoso del mundo, y tras esas decisiones tan descabelladas que ha tomado, sea una gala reivindicativa por los derechos de los migrantes en general, y de los mejicanos en particular.

Desde aquí ponemos nuestro granito de arena con un par de recetas muy sencillas y con todo el sabor de México: guacamole y salsa de queso para mojar totopos, que es como en el país azteca denominan a los trozos de tortilla fritos o tostados, lo que nosotros conocemos comúnmente como doritos (sí, ya sé que eso es una marca comercial). Así que nos ponemos manos a la obra con nuestro picoteo para una cena informal en la noche de los Óscar más reivindicativa de todas. Esperemos.

Ingredientes para el guacamole:
  • 1/2 cebolleta
  • 1 chile habanero (esto va un poco al gusto)
  • 2 aguacates
  • Zumo de lima
  • Sal

Ingredientes para la salsa de queso:
  • 1 trozo de pimiento verde
  • 1 trozo de pimiento rojo
  • 10 lonchas de tranchetes con cheddar
  • 200 ml de leche evaporada
  • 6 lonchas de chorizo picadas
  • Aceite
  • Sal

Elaboración del guacamole:
  • Empezamos picando la cebolleta y el chile habanero finamente. Reservamos.
  • Abrimos los aguacates por la mitad, a lo largo, clavamos el cuchillo en el hueso, giramos y lo quitamos. Con ayuda de una cuchara sacamos toda la pulpa y la ponemos en un bol.
  • Añadimos sal y zumo de lima. (Es imposible que os dé una cantidad exacta, porque dependiendo del aguacate, su grado de maduración y vuestros gustos variará. Sólo hay que lograr un equilibrio).
  • Con ayuda de un tenedor aplastamos la pulpa del aguacate hasta conseguir un puré no muy fino.
  • Añadimos la cebolleta y el chile habanero picados, mezclamos bien, rectificamos de sal y zumo de lima si hiciera falta y listo para servir.

Elaboración de la salsa de queso:
  • Lo primero que tenemos que hacer es picar el pimiento verde y el rojo. Ni muy fino, ni muy gordo.
  • Con un chorrito de aceite ponemos a pochar los pimientos en un cazo.
  • Cuando estén blanditos, colocamos los tranchetes de queso encima y dejamos que se vayan fundiendo.
  • Añadimos la leche evaporada y mezclamos bien, asegurándonos de que el queso se ha fundido.
  • Cuando esté listo añadimos el chorizo picado, mezclamos bien, salamos si hiciera falta y servimos caliente.

A comer:
  • Con nuestras dos salsas listas sólo nos queda abrir una bolsa de totopos (o de Doritos, vale), colocar un gajo de lima en el cuello de una botella de Coronita, y disfrutar.

domingo, 5 de febrero de 2017

Blondies (para la resaca de los Goya)

Hoy venimos con una receta facilita, que estamos pasando la resaca de los premios Goya, la fiesta del cine español. Aunque por la cara de Pedro Almodóvar, que no sonrió ni una vez durante la ceremonia, más bien parecía el funeral del cine patrio. La verdad sea dicha, la gala fue aburridísima, presentada por un Dani Rovira sobrevalorado (sobre todo por él mismo) y con muy poca gracia. Con la mujer de Ken Loach sin entender ni papa (y casi mejor) y preguntándose dónde se había metido, y una Ana Belén que iba espectacular, pero que no pudo estar más tediosa y con menos chispa durante su discurso de agradecimiento por el Goya de honor. Ni siquiera su momento  declaración de amor a Víctor Manuel pudo levantar aquello.

Por eso y porque la semana pasado hicimos una tarta Fraisier, y por lo visto os pareció algo complicadilla de hacer. Yo creo que no, que sólo hay que hacer varias elaboraciones más o menos sencillas y juntarlas todas, pero bueno. Así que hoy venimos con una receta muy sencilla, una receta que hasta un monito sin amaestrar podría hacerla. Hoy preparamos blondies, los hermanos rubitos de los brownies. Aunque no son tan rubitos, son un poco más oscuros, así como los brownies no son tan marroncitos, son un poco más oscuros.

Azúcar moreno, nueces de macadamia, avellanas y trocitos de chocolate blanco serán nuestros aliados para darle sabor a este bizcochito que para ser perfecto debe quedar un poco más firme que los brownies. Así que vamos, si nos ponemos ya con nuestros blondies los tendremos listos para disfrutarlos en la merienda de esta tarde, en un descansito del momento resaca de los Goya, tirados en el sofá con peli y mantita.

Ingredientes:
  • 150 g de mantequilla
  • 50 ml de aceite de girasol
  • 300 g de azúcar moreno
  • 2 huevos
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 300 g de harina de fuerza
  • 2 cucharaditas de levadura en polvo
  • 1/2 cucharadita de sal
  • 75 g de chocolate blanco troceado
  • 50 g de nueces de macadamia troceadas
  • 50 g de avellanas troceadas

Elaboración:
  • Empezamos fundiendo la mantequilla, a fuego lento, en un cazo. Cuando esté lista la ponemos en un bol con el aceite, el extracto de vainilla, los huevos y el azúcar y lo batimos todo hasta que doble su tamaño
    .
  • Incorporamos la harina y la levadura tamizadas, la sal y batimos sólo hasta que todo esté perfectamente integrado.
  • A continuación añadimos el chocolate blanco y las nueces troceadas y mezclamos bien. (Esto mejor si lo hacemos con una espátula).
  • Echamos la mezcla de nuestros blondies en un molde previamente engrasado y enharinado (Yo he utilizado uno rectangular de 24x30) y, con las manos húmedas, extendemos bien la masa en el molde.
  • Metemos el molde al horno, que tendrá que estar precalentado a 180ºC, y lo cocemos durante unos 25 minutos. (Tiene que estar firme al tacto).
  • Sacamos del horno, dejamos enfriar, cortamos ¡y a disfrutar!